domingo, 26 de diciembre de 2010

Curiosidades 1ª Parte

"(...) y de que había ante ella un pasillo salpicado de anchas hojas de castaño recíen caídas y amarilleadas ya por el otoño (...)" fragamento del relato "La Puerta en el Muro" de H.G. Wells.
       La primera vez que vi esta señorial portada, vino a mi memoria un relato de H.G. Wells, La Puerta en el Muro, que leí por primera vez siendo adolescente y que desde aquí, aprovecho para recomendar su lectura. No es que guarde una gran similitud con la descrita en el relato, pues la de la narración de H.G. Wells es una sencilla puerta urbana, de color verde y abierta en un muro blanco, y ésta, aunque ahora ruinosa y decadente, su monumental aspecto, nos hace vislumbrar un noble y opulento pasado.  
   Ante ella, muchos pasarían de largo. Otros, sin llegar a atravesarla físicamente, lo harían con su imaginación, y algunos, los menos, movidos por una innata e irrefrenable curiosidad, no dudarían en ir más allá de su umbral.
  A menudo, a medida que uno alcanza ciertas responsabilidades u obligaciones en la vida, va perdiendo curiosidad e imaginación, para dejar sitio a las consideradas "cosas serias" de la vida. Olvidando que a veces, los pequeños detalles, lo anecdótico, pueden esconder tras de sí una interesante historia. 


   Estas dos fotos fueron sacadas en lugares distintos, la primera en la aldea de Laxas-Boborás (Ourense) y la segunda, me llamó la atención encontrarla en la pared del nº 7 de la Calle Andrés Mellado de Pontevedra. Aunque en distintas localizaciones, ambas están de alguna forma relacionadas. La primera, en la que se puede leer en letras rojas "Viva Calvo Sotelo", es probable que haya sido hecha en el año 1.919, cuando José Calvo Sotelo es elegido diputado a Cortes por Ourense por el Distrito de Carballiño (al que pertenecía el lugar en la que fue hecha), también pudo haber sido en el año 1.933 cuando volvió a ser elegido (ya durante la República), o incluso en el 1.936, año en que fue asesinado, hecho éste que provocó la llamada "Solución de Fuerza" y que fue el detonante, ni más ni menos, de la Guerra Civil Española (1.936-1.939). Ignominioso período con el que, probablemnte, se corresponde la plantilla, "REFUGIO PARA ATAQUES AÉREOS", pintada en el nº 7 de la C./ Andrés Mellado de Pontevedra.
   En todo caso, sea como fuere, ambas, obstinadas, resisten el paso del tiempo, como testigos mudos de nuestra más reciente historia.

   Ya para finalizar, hace ya muchos años que reparé en el símbolo que figura en  la gran verja de hierro de la entrada principal al antiguo cementerio de Lalín, su composición, ciertamente tenebrosa, expresa de manera gráfica el inexorable paso del tiempo y el fin que a todos os espera...

viernes, 10 de diciembre de 2010

Nuestro mundo está en crisis



   Repasando mis notas, reparé en estas líneas que escribí allá por septiembre del 2.008, cuando la crisis, según quien la analizase, tanto podía no existir para unos, como ser evidente para otros.
   La siguiente opinión, en su día, fue escrita para ser enviada a una conocida revista semanal, y así fue, que la envié...y no me la publicaron.
   Han pasado más de dos años, y  la crisis, evidente ya para todos, puede, no obstante, para algunos, atendiendo a sus circunstancias, mostrarse como relativa e incluso inexistente


"Nuestro mundo está en crisis"

   Resulta ya innegable, como inequívocas alarmas, todos los indicadores económicos se disparan;  la venta de coches cae en picado; las, hasta hace poco, alegres y prolíficas hipotecas, se transforman ahora en embargos "sumarísimos"; el sector inmobiliario se hunde; salimos menos; viajamos menos; compramos menos; las bolsas, la de la compra incluida, se tambalean; el petróleo baja; el petróleo sube...y es que está claro, estamos en crisis.
   Abro una revista, y veo que Nigeria, produce al año más de dos millones de barriles de petróleo, pero sus habitantes viven en la más absoluta de las miserias, se ahogan en la contaminación generada por las petroleras, se mueren, literalmente, de hambre, mientras la riqueza, paradójicamente, fluye bajo sus pies en forma de oleoducto. Leo una de las cartas al director, que trata, como no, de la crisis.
   Sigo ojeando, pasando páginas; un sultán, en plena crisis, se compra un equipo de fútbol inglés y paga astronómicas cifras al contado por futbolistas de países en crisis, y no es un capricho,todo, según dice, forma parte de un plan, lo que me deja mucho más tranquilo.
   Continúo pasando páginas; analistas financieros... especuladores, apuestan ahora, en medio de esta crisis, más que nunca y con más fuerza, por el oro como valor seguro. Mientras, a muchos quilómetros de los enmoquetados despachos de la City, trabajadores !niños!, en condiciones infrahumanas, se juegan la vida extrayendo el preciado metal.
   Y es que, definitivamente, estamos en crisis...Nuestro Mundo está en crisis. 

J. Carlos Calvo Ulloa.

domingo, 28 de noviembre de 2010

"LONDON CALLING"

Ver, enfocar, disparar.
    Es Londres una de esas ciudades que forman parte de nuestro imaginario colectivo, y es que no hay ciudad en el mundo, con el permiso de Nueva York, sobre la que más se haya escrito, pintado, filmado y fotografiado.
   Nunca he estado en NYC, pero me atrevo a asegurar que el día que vaya, porque iré, tendré la misma sensación que todo viajero primerizo tiene de Londres, esa sensación de familiaridad, como de haber estado antes allí.
   Bien es cierto, que mucho se ha escrito, pintado, fotografiado y filmado también sobre otras ciudades, como París, Roma, Madrid, Berlín...así es. No obstante, ninguna como Londres ha sabido ir con los tiempos, se ha nutrido y se ha ido amoldando a las distintas situaciones en las que le ha ido poniendo la historia, ha sabido, como ninguna, sacar partido de sus circunstancias, de las favorables y de las adversas.
   Sin duda, su condición de metrópoli del ultimo gran imperio colonial europeo, le ha otorgado a Londres ese rasgo característico de urbe cosmopolita, pero quedarse sólo en esto sería un error, que además de hacernos incurrir en el tópico, revelaría en nosotros, y he aquí la paradoja, una escasa amplitud de miras.  
   El viajero que acuda a Londres con la perspectiva de la totalidad, se equivoca, pues es así, sin duda, inabarcable. Es importante saber, que esta ciudad, el Gran Londres, está compuesto por infinidad de aldeas, pueblos, barrios e incluso ciudades colindantes, que, como círculos concéntricos, se van sucediendo, ese es su germen, y en todos y en cada uno, reside su esencia.
   Disfrutar de Londres, es disfrutar del momento y del lugar en el que estés, en cualquiera de sus fabulosos parques, en sus mercados, en la barra de un pub ante unas pintas de cerveza... observad, pues cualquier rincón, cualquier calle, podría esconder una anécdota que nos ayude a comprender la esencia de esta maravillosa ciudad, y recordad, que como sentenció Samuel Johnson, "cuando un hombre se harta de Londres, es que está harto de la vida".

Texto y fotos de J. Carlos Calvo Ulloa.  


Skyline de Londres
Niña en Covent Garden

Arte urbano en Brick Lane
Puestos en Green Market
Richmond Park


Branca Nostalxia

   Esta mañá, repetín o mesmo paseo, esta vez en solitario, que fixera o domingo pasado. A mesma paisaxe de hai unha semana, ofrecía hoxe unha imaxe diferente por mor do manto branco desta primeira nevarada. A neve traeme lembranzas de neno, de cando saía a xogar polos campos próximos a miña casa, agora nin neva coma antes, nin quedan campos...







domingo, 21 de noviembre de 2010

A Terra permanece...


       Hoxe, aproveitando unha pequena tregua que nos deu a persistente choiva destes días, decidín investir a miña mañá do domingo en dar un longo paseo polos arredores de Lalín. E quixo a casualidade, que o fixera na compaña de Juan Otero Abeledo, que ,como el di, apelídase igual que Laxeiro, pero non é Laxeiro, non...nin falla que lle fai.
       Está dotado Juan dunha visión primixenia das cousas, observa e vive a súa vida con inocencia, o que non lle impide ser un loitador, un bo home, un rapaz feliz...
       Durante o noso paseo, mentres tomaba algunhas fotografías da nosa paisaxe, el ofrecía a súa particular visión do que eu vía e fotografaba.
        Contoume que lle gustaba moito pasear, que o facía para estar en forma, porque, segundo me dixo, hai que coidarse para ser feliz, e estar cachas para ligar, razón non lle falla dende logo...saude e amor, esa é a cuestión.
       As súas cifras por un momento abrumáronme, sobre todo as do verán, tódolos días dez quilómetros despois de cear! E as fins de semana, dependía de onde estivese, se lle coincidía nas Rías Baixas, podía ir e volver andando dende Pontevedra a Sanxenxo ou mesmo ata a Lanzada! que é a súa praia preferida. Pregunteille se levaba roupa ou algo reflectinte, pois moitas veces as camiñatas eran pola noite, el díxome que ía con moito coidado, que se ten moito cariño.
       Algún pequeno silencio para contemplar a paisaxe, e el volvía a darme a súa particular visión das cousas. Dende o alto de Filgueiroa hai unha bonita vista da vila de Lalín e dende alí, como se pode apreciar na fotografía de enriba, distínguese o noso espectacular consistorio de deseño, case rematado. Para el, a nova casa do concello, nin castro tecnolóxico, nin deseño vangardista, nin nada de nada, el, sinalando o vello pombal dunha casa, dixo convencido que o novo edificio consistorial parecía iso... un pombal.
       Xa rematando o paseo, fíxome unha importante revelación, que agora aquí vola veño a contar: díxome que para ser feliz son necesarias dúas cousas: cariño e disciplina, moita disciplina recalcou. Ficou uns instantes mirando para min cos seus pequenos e inocentes ollos verdes, nos que se apreciaba unha mirada de satisfacción, propia de quen se sabe en posesión da verdade, da súa verdade.
       Enfilamos por Donramiro cara ao centro de Lalín, non sen antes pararnos ante a casa de José Otero Abeledo (Laxeiro), e no cruce da circunvalación nos despedimos...un bo tipo este Juan.

X. Carlos Calvo Ulloa.

jueves, 18 de noviembre de 2010

  








Como xa saberedes, hai uns meses faleceu o propietario legal do emblemático Castelo de Pambre. Manuel Taboada, que así se chamaba, rehabilitou o título de conde de Borraxeiros en plena dictadura. Pero, que é un conde sen castelo? debeu pensar, e xa  nos derradeiros anos do franquismo, foi cando o mercou por dous millóns das antigas pesetas (12.000 euros!) xunto coas terras adxacentes .
E así, dende o ano 1.974, este señor, desatendendo as demandas dos veciños, facendo caso omiso ás indicacións e aos expedientes sancionadores da propia Administración autonómica, e a pesar de estar declarado Ben de Interese Cultural, pechou o castelo a cal e canto, e deixou que o tempo e a dureza dos nosos invernos seguisen facendo mella nos seus debilitados sillares.
Debía ser o señor Taboada de profundas conviccións relixiosas, ou ao mellor temía pola salvación da súa alma, eu non o sei. O certo é que, piadoso el, no seu testamento legou o castelo aos "Hermanos Misioneros de los Enfermos Pobres de Teis", que pobres si, pero a vaquiña polo que vale... e agora ameazan con vender o castelo ao mellor postor se a Xunta ou outra Administración non se apuran a comprarllo.
Postos xa en antecedentes, creo que pode resultar interesante o artigo que alá polo nadal de 2.008 me publicou La Voz de Galicia na súa edición de Lugo, e no que dicía o seguinte:

"O Castelo de Pambre"

Lembro a emoción coa que fun por primeira vez na busca do Castelo de Pambre. Dende esas, moitas foron as veces que volvín visitalo e moitos os anos que pasaron. Aínda así, non me abandona a emoción cando recortado no horizonte vexo de novo aparecer a súa impoñente silueta de torres e ameas fundíndose coa paisaxe, envolto entre a brétema coma unha fantasmal aparición ou bañado polo sol que fai brillar o roxiño granito do país co que foi erguido.
Nesa atmosfera irreal, case máxica, resulta doado abstraerse e imaxinar a un don Gonzalo Ozores de Ulloa encaramado na torre da homenaxe outeando o horizonte na busca das mesnadas de Vasco Gómez das Seixas. Dende esas, moitas foron as loitas e asedios que tivo que resistir e resistiu, moitos os séculos que pasaron, para chegar ata os nosos días esmorecendo por culpa da fraqueza institucional e á arrogante desidia do seu propietario legal (non moral).
O Castelo de Pambre é, sen dúbida, o mellor expoñente de arquitectura militar medieval galega, un importante anaco da nosa historia , un Ben de Interese Cultural do que se está vendo privado o pobo e que se alguén non lle pon remedio, o que os Irmandiños non foron quen de destruír, sucumbirá irremediablemente ao deixamento e as inclemencias metereolóxicas.
A recuperación e posta en valor do castelo, por custosa que poida chegar a ser, deberá contemplarse sempre como unha inversión, pois con ela estarase ampliando de maneira significativa a oferta cultural da nosa terra. Servindo ademais de axente dinamizador dunha comarca interior como é a Ulloa que debe ter e ten na súa riqueza cultural e natural o seu principal atractivo.
Sen ánimo de demagoxia, non quixera rematar estas liñas sen facer unha reflexión: De que serve ter invertido, mellor dito, dilapidado miles de millóns de euros nun megalómano proxecto paradoxicamente chamado Cidade da Cultura, cando unha meirande parte do noso patrimonio cultural se destrúe e desaparece por falla de medios.
A Xunta ten a obriga de preservar e protexer ese patrimonio, destinando os medios necesarios para a súa recuperación e mantemento,

X. Carlos Calvo Ulloa (La Voz de Galicia, 28/12/2008).

domingo, 14 de noviembre de 2010

DESFEITA



   Desfeita, pensei, cando hai uns días, paseando polas soberbias carballeiras de Donramiro, vin a desoladora imaxe que ofrecía unha das corredoiras que atravesa a coñecida como Carballeira da Crespa. A mesma, flanqueada por centenarios e nodosos carballos, que figura na fotografía (foto Miguel Calvo Ulloa) da cuberta da miña pequena novela ("La Casa de Brandán") e que podedes apreciar no deseño da portada deste blog.
   Agora é historia, xa pasou, e así, onde antes había un sendeiro, aberto primeiro polos usos tradicionais e racionais dos homes, e moldeado logo polo tempo e a natureza, ata fundirse e integrarse na paisaxe, agora, despois de que a maquinaria pesada arrasase as súas marxes, deixando as raices das árbores á vista, alterando a súa característica forma envolvente, só queda unha pista con firme de alcatrán, sen encanto, sen alma, fea...realmente fea.
   A desolación, tornou en rabia ao saber, por unha veciña que apañaba castañas nun souto próximo, que tal estrago, fora feito polo Concello de Lalín. Non é posible, pensei, que unha administración poida amosar, cando menos, semellante falla de sensibilidade, iso no suposto de que tal acometida sexa legal.
   Pena de gobernos, que de conservadores só teñen o nome. Tan difícil é darse conta de que o noso maior patrimonio, o noso monumento máis senlleiro, non é de formigón ou cristal, nin está deseñado por caros e prestixiosos arquitectos; o monumento que mellor nos representa como pobo é a nosa natureza. A natureza legounos un tesouro; o mérito é só dela, respectalo e protexelo é a nosa obriga.

SAÚDO

   Hola, levaba un tempo dándolle voltas a esto de crear un blog onde, con certa periodicidade, plasmar as miñas impresións sobre os temas que me interesan, afeccións, inquietudes...unha boa forma de ordenar ideas, sen máis.